 |
 |
|
 |
|
 |
 |
 |
 |
 |
|
Juan Ramón Jiménez es uno de los autores españoles más famoso de la historia. Fue galardonado por su labor literario con el Premio Nobel de Literatura en 1956, con una destacada valoración a su narración en prosa poética “Platero y yo”. Precisamente esta obra es, junto a Don Quijote de la Mancha, la creación escrita española más traducida a otros idiomas.
El desarrollo artístico de este autor evoluciona en relación a hechos trascendentales que transcurren durante su vida, así como influencias literarias que va descubriendo. Nació en Huelva en diciembre de 1881. En principio todos sus estudios lo destinaban a ser un prometedor abogado, pero el Modernismo y más concretamente su máximo exponente, Rubén Darío, le empujaron a dejar los estudios en busca de una perfección escrita.
Esta primera etapa, denominada sensitiva, que dura hasta 1915 está marcada por la muerte de su padre y sus experiencias en España hasta que viaja a Estados Unidos. Literariamente está influenciado por Bécquer, el Simbolismo y el Modernismo. En estos años escribe unos poemas melancólicos, llenos de recuerdos y deseos del autor. No obstante, a pesar de su notable creación poética en este período, es también cuando escribe “Platero y yo” (elegía andaluza de 1914), en la que fantasía y realismo se confunden en las relaciones de un hombre y su asno.
Visitó Estados Unidos, conoció a su alma gemela con quien contrajo matrimonio y desarrolló su etapa intelectual. La poesía en inglés le marcó tanto como para cambiar su estilo hacia una evolución espiritual en busca de la belleza, la pureza poética, la salvación.
“Diario de un poeta recién casado” (1916), precisamente escrito cuando se casó con Zenobia Camprubí, es de los más destacados de esta época. Tiene una fuerte influencia del mar como fuente de inspiración, está despojada de los tintes modernistas de los inicios del autor e incluso se atreve a experimentar un estilo que posteriormente será más exprimido por autores de la Generación del 27.
Otras obras interesantes son “En Piedra y cielo” (1919) y “La Estación total” (1923-36). El 22 de agosto del 36 Juan Ramón Jiménez debe exiliarse para zafarse de la censura dictatorial que se aplicó en España.
Toda su creación nacida en el exilio recibe el nombre de época suficiente o verdadera. Esta vez Juan Ramón es más místico que nunca. Busca la trascendencia a través de su poesía, identificando a Dios con la belleza y fijándolo como su máximo objetivo a alcanzar. “Animal de fondo (1949) el poeta nos refleja esa búsqueda de Dios. Es más, lo sitúa no de forma externa, sino dentro de la propia belleza que puede guardar la poesía de uno mismo, haciendo así más introspectiva su obra. En “Dios deseado y deseante” (1948-49) llega incluso a identificarse con ese Dios que con tanta ansia busca.
En esta época su estancia es móvil, de Estados Unidos a Cuba y a Puerto Rico. En este último país residió hasta su fallecimiento en 1958. Dos años antes recibió el Premio Nobel de Literatura. Su cuerpo fue repatriado a España. Actualmente existe en Huelva la Casa Museo Zenobia y Juan Ramón, custodiada por la Fundación Juan Ramón Jiménez y, además, se celebra desde 1999 el encuentro anual de poesía Voces del extremo en Moguer (Huelva), ciudad de nacimiento del autor, con textos poéticos que mezclan un estilo similar al del poeta, junto a nueva poesía social o política. |
 |
|
|
|
 |